Cuando la obligación se convierte en placentero recuerdo

Hace muchos años que dejé los estudios previos a la universidad y la academia (BUP y COU de aquel entonces), pero hoy conservo y he recuperado libros de aquellas mismas editoriales; recuerdo a los profesores y lo que estudiaba y aprendía; y vuelvo a leerlos aprendiendo de nuevo -estoy con la Literatura de BUP-, asentando conocimientos, repasando, y mezclando lo que aprendo y recuerdo con las vivencias de aquella época en una especie simbiosis entre libros, recuerdos, personas, lugares, situaciones...

"Estudiar no es sólo leer y repetir. Estudiar es además reflexionar, relacionar, integrar, detallar, aclarar, absorber, rechazar, decidir, saber lo que importa y lo que no. Es una operación muy compleja y a la vez muy natural. Estudiar es hacer funcionar el espíritu, partiendo a veces del espíritu mismo o por incitación de cosas que provocan una curiosidad: es decir, que gustan positivamente. Lo que no gusta, lo que no provoca un u otro grado de fascinación, no puede ser objeto de reflexión ni de estudio, no hay atención ni aproximación posible. Estudiar es una forma del amor, una forma de la sensualidad: la caricia mental más fina y deliciosa que el espíritu puede producir. Estudiar para un estudiante auténtico es gozar. Es, en definitiva, la libertad." Josep Pla (El quadern gris, 1966)

Estos son dos de mis libros de entonces; Literatura de 3º de BUP, y Geoeconomía de 2º, en esta última asignatura la profe me puso un nueve porque según ella "yo sabía mucha geoeconomía" (mi nota creo que era entre 7 y 8), y porque también según ella, el 10 es sólo para el profesor.