Manolo en el Tibet

Mi amigo Manolo, del que he hablado bastante en diversas entradas de este blog; está ahora destinado como diplomático en la Embajada en Pekín. Hace viajes por la China profunda y me ha enviado esta joya:


Que al responder le he comentado en los siguientes términos:

Esta foto es hipnótica, mielmano; no puedo dejar de mirarla fascinado, hechizado. En ella no falta nada: el gorrico casposo, el palo guarrindongo con los dos pajarracos que no sé si están vivos (no quiero ni imaginarlo) o disecados, tú haciendo la señal de la victoria con los dedos como Churchill, el cartelico de la izquierda con los precios de vete tú a saber qué pá los turistas gañanes que deben llegar a ese lugar en legiones; y luego ya para rozar lo sublime: las bolsas de plástico rojo en el suelo, que eso es impagable.

Pero el maestro de David Carradine el Pequeño Saltamontes, ahí, vivo todavía a sus 120 años, con más mierda que la barriga una burra (dile que no se le ocurra bañarse que se muere del tirón), agachadico humildemente con la barbica esa que si se la desparasitas puedes fundar un museo de entomología. Para eso ya no tengo palabras...

Grandioso.

Manolo, eres insuperable: eres una diosa egipcia. You're my fucking hero!!!