Koke se ha quedado roque esta tarde, antes de ir de paseo con su mamá por las calles de Barcelona. Qué morritos tan monos tiene. Hace un par de días que cumplió 21 mesecitos.
Espolla - Rabós
El viernes pasado visitamos el sur de Francia y el Alto Ampurdán, una bella y pintoresca comarca catalana en la que he habitado diez años y medio. Paramos en un pueblo llamado Mollet de Peralada, donde taaaaaaantas veces hemos cenado en el restorán "Ca la María". Y no pude evitar fotografiar el pintoresco paisaje ampurdanés, que servía de fondo a tantísimos cuadros del genial Salvador Dalí. En la foto de debajo aparece el cementerio de la localidad, donde se recogen unos excelentes caracoles que son cocinados en salsa en el local susodicho. Ahí están las indicaciones para llegar a Garriguella, en cuyo casino tienen un magnífico "vi daurat" (vino dorado), con el que solíamos regar las anguilas pescadas en las Marismas de Ampuriabrava (Els Aiguamolls en la lengua vernácula del lugar). Y qué decir de los otros dos pequeños pueblos tan cercanos entre sí, tan sorprendentemente cercanos de hecho, a tenor de sus respectivas toponimias a cual más fálica:
He aquí un detalle del cartel que indica el camino para decantarse por Espolla o por Rabós:
Y en este mapa puede constatarse que ambas localidades distan entre sí menos de cuatro kilómetros. En las dos se puede saciar el hambre del cuerpo con la excelente pitanza que sus pequeños locales elaboran, ya sea a base de civet de jabalí, caza, animales criados en granja, y en definitiva la fabulosa y contundente cocina ampurdanesa de ambos pueblos, cuyos gentilicios por cierto nunca he preguntado (pulsar sobre el mapa para mayor detalle):
Fernando
Chutando con el Hecker & Koch G-36
Chutando con el Hecker & Koch G-36, también a la cadera. Luego sabe mal no llevar siempre uno encima o en el coche porque es tan fácil de disparar que engancha. Entiendo que en las películas modernas, héroes y villanos utilicen este juguetito, porque es muy divertido chutar con él:
Nieve a espuertas en el centro de Barcelona
Mi mujer Alba, explica a Koke nuestra hijilla qué cosa es la nieve que descubre por primera vez, pues hace unos días nos sorprendió una nevada brutal en nuestro barrio, el centro de Barcelona, que haría que nos remontásemos en los anales de la historia hasta 1962 para encontrar otra similar -aquella fue mayor-, y pueden verse copos cayendo mánsamente, copos enormes como la cabeza de un enano acondroplásico:
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