Magia; Koke on stage

El sábado pasado asistimos a una sesión de prestidigitación, muy divertida y amena. El colofón fue un número que causó bastante sensación, y para el que fue seleccionada de entre el público, entre otras -el tío cabrón sólo elegía mujeres- Koke, mi esposa. Mi amigo Francesc inmortalizó su subida al escenario con algunas instantáneas.
En la foto de arriba puede verse al mago aleccionando a mi churri, y en el montaje que he elaborado debajo pueden irse siguiendo los pasos de izquierda a derecha en dos filas; 1) el mentalista instruye a sus colaboradoras, 2) es maniatado a la espalda por una de ellas, 3) después le atan fuerte y enrevesadamente el cuerpo con una soga; y pasamos a la fila de debajo, 4) se levanta un tupido velo sobre Koke –con su chaquetita puesta como puede verse-, que los oculta del público exactamente treinta segundos cuidadosamente contados por mi amigo Jaime que de estas cosas sabe un güebo, 5) se baja la tela que los cubría apareciendo Koke sin chaqueta y el mago con ella -la chupa- colocada sobre su cuerpo, pero bajo las cuerdas, y 6) al artista le desatan las manos y, después, le desenroscan la soga, para que podamos recuperar la chaquetita de color... mmmh... bueno, de uno de esos colores que los hombres no sabemos discernir.
Pulsando en las imágenes se amplía el tamaño. No conocíamos al ilusionista de nada ni había nada preparado por parte de Alba. No sabemos el truco. Sólo parece evidente que eligió a Alba porque era casi tan alta como él.