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Lvmen Dei

007

Escrito a la hora de Laudes.

Alguien me preguntó ayer si trabajo o he trabajado para los Servicios de Inteligencia. Le contesté que sí y además le enseñé mi acreditación como agente secreto, documento en cuya foto como es lógico aparezco de espaldas para evitar ser identificado. Esta es la foto en cuestión:

Se ven las orejas pero son postizas, y el pelo canoso es un peluquín, que yo llevo siempre la perola afeitada y además con navaja, no con cuchilla: acudo a la Barbería Vivancos, que es de las de antes. De las "postrimerías" que dice mi amigo Francesc.

El tocado con que me cubro no está elegido al azahar, dispone en su diseño de un rabico en el que hay camuflada una antena con la que puedo contactar telepáticamente con la CIA, la Guardia Vaticana, el Práctico del Puerto de Tarragona, el Tribunal de la Rota, la Carnicería Sanzot, la Embajada de Prusia en Siam, y hasta con la peluquería de mi mujer si veo que tarda más de cuatro horas en regresar a casa.

007 (006 en Canarias)

Lucisque Lumen crederis, Lumen beatis prædicans (Canto de Maitines)

Apetito - Ford Lincoln Continental Mark V

Son las seis y media de la mañana y me iba acostar, pero me está entrando un apetito del copón. Apetito de comer I mean, que no hambre. Hambre es lo que tienen en Somalia.
 

De paso aprovecho y subo una foto de un Ford Lincoln Continental Mark V de 1978, que es uno de los coches que me quitan el sentido de tanto que me gusta; 8 cilindros en V, 7.500 c.c., tapizado en piel, asiento delantero corrido, automático, tres toneladas... lo habitual en el país y la época. La foto no está trucada: sólo tiene dos puertas pero mide seis metros (un metro más que un Mercedes Serie S o un BMW Serie 7, que son los coches más largos que se suelen ver por las calles).

Fidelia omnia mandata eius, confirmata in sæcula sæculi, facta in veritate et æquitate (del Salmo 110)