Esta vez dos fotos robadas a mi rorro en una farmacia. No sé qué tiene esta niña que siempre parece que va a hacer algo que sembrará el terror entre los presentes, y el desconsuelo entre sus padres:
Oh oh, aquí abajo ya me ha pillado, pero ello no evitó que la pila de cajas de algún específico se desmoronase cual atrezzo de la película "55 Días en Pekín" en las escenas finales.