Goya; la evolución en el arte


Parasol
Goya siguió al principio de su obra la ortodoxia academicista, pero evolucionaría hasta sembrar la semilla del impresionismo, y llegaría hasta el arte abstracto, y ya en los siglos XVIII y XIX. Goya fue dejando una impronta ciertamente sorprendente a lo largo de su trayectoria, pues al principio de su carrera nos ofrece escenas de la placentera vida de las gentes bien aposentadas y ociosas; con luz, color, brillo, alegría, diversión, como en su obra "Parasol", que podemos ver sobre este párrafo.
Pero más tarde, y costando creer que nos hallemos ante el mismo artista, encontramos cuadros que muestran escenas aterradoras y que parecen sugerir una mente atormentada, con tintes de impresionismo, y que, para mí, son lo mejor de su obra; como muestran sus "Pinturas Negras", en las que impera ese color justamente, y donde las caras son amargas, las expresiones sórdidas, y los fondos nada apetecibles de visitar, si es que alguna vez han existido. Un ejemplo que siempre me ha impresionado, es el cuadro "Viejos comiendo":

Viejos comiendo

La esencia del ser de la derecha resulta difícil de analizar, con esas cuencas vacías, ese aspecto cadavérico, esa lista en la que parece estar eligiendo un nombre -por lo que se supone que se trata de la misma muerte. Pero la vieja de la izquierda es aún más desasosegante, por la desfachatez con que come ese caldo junto a tan inquietante compañía, por su mirada sardónica y resabiada. Qué puede asustar a un ser así, y a quién dejaría con el ánimo tranquilo, si parece que todo lo perverso de este mundo es menos perverso que esa criatura, esa desdentada abominación.

¿Qué ocurrió en la mente de Goya para evolucionar en su trabajo hacia semejantes contenidos? Es un gran misterio la mente humana.