Me entusiasman por igual
el cine de ciencia ficción y las pelis antiguas. Llama la atención cómo el
género sci-fi en sus albores se amparaba en la simple realidad. En esta
sensacional película de 1950, dirigida por Irving Pichel y con guion nada menos
que de Robert A. Heinlein (autor de "Starship Troopers", el libro de
los 50s, no la película de los 90s), puede verse en primer término una V2 de
Wernher von Braun, de la SGM; el primer misil balístico y cohete espacial real
de la historia.