El lunes organicé una fiesta sorpresa de cumpleaños para mi amigo Xavier Belles, sesenta le cayeron. Estas palabras y esta foto dedica a mi nenita, pero también a todos los asistentes, que hubieran sido aún más de no caer la cosa en el primer día de la semana y en obligaciones diversas.
"Esta preciosa diablilla formaba parte del grupo
con el que cené ayer. Llevaba puestas mis gafas de ver de cerca. Jugar con ella
me dejó exhausto, pero me alegro el dia. Si la viese a diario, yo no
conseguiria sobrevivir dos semanas. Y tiene un nombre adecuado: Alba. Una
súbita y renovadora entrada de luz. Aún tengo agujetas. Pero aún estoy feliz.
Ayer fue un dia antologico. Y Alba no tiene la exclusiva de mi cumulo de
agradecimientos."
Determinadas personas hacen felices a los demás siendo felices ellos. De Xavi he aprendido el valor de la serenidad y la compostura como actitud para pasear por la vida.