Plazas de soberanía
Todos
sabemos de Ceuta y de Melilla, y hemos visto películas ambientadas en las
Chafarinas o hemos escuchado hablar de este archipiélago español ubicado en las
costas de Marruecos. De igual modo que el mundo entero conoció al islote de
Perejil al pararse los corazones del planeta durante el glorioso desembarco por
tierra, mar y aire de las Fuerzas Armadas españolas (algo de sarcasmo siempre es de agradecer). Por no hablar de las Islas
Canarias, también en África, lugar turístico donde los haya.
¿Pero
recordamos o conocemos todos las otras dos plazas de soberanía española que se
hallan en la costa marroquí?
Son
el Peñón de Vélez de la Gomera, unido a reino alauí por un pequeño istmo que
puede verse en la foto.
Y el Peñón de Alhucemas, sobre el que podemos ver un
helicóptero CH-47 Chinook; pues ambos peñones se hallan permanentemente
ocupados por una sección del Ejército que garantiza su pertenencia al Reino de
España.
No faltará quien se pregunte para
qué queremos esos dos peñascos en ese lugar, aunque en Perejil quedó claro
lo que España está dispuesta a llegar hacer con tal de mantener el 50% de
soberanía que posee sobre el islote.
No digamos si la soberanía es total.
Incluso
los más mordaces pueden pensar que emplazamientos así parecen
magníficos refugios antizombi, o estupendas bases de supervillano al estilo 007.
Pero ahí va la reflexión, ahí van las fotos, y sobre
todo ahí va la idea de que la pertinaz presencia española manteniendo la soberanía sobre lugares como esos, puede hacer reflexionar sobre, de entre las muchas, alguna de las posibles consecuencias de una mala gestión en el llamado proceso soberanista en Cataluña.